Este informe es el decimocuarto de una serie anual que evalúa los principales problemas de desarrollo. Este informe sintetiza e interpreta las lecciones de más de cuarenta años de experiencia en desarrollo. Junto con el informe del año pasado y el del próximo año sobre la pobreza en el medio ambiente, busca brindar una visión general integral de la agenda de desarrollo. La década de 1990 comenzó con cambios dramáticos, ya que muchos países de Europa del Este y otros lugares iniciaron reformas ambiciosas de sus sistemas económicos y políticos. En el contexto de estas transiciones, este informe vincula el debate histórico que aconsejó a los responsables de la formulación de políticas en sus decisiones pasadas, las lecciones de la experiencia y el pensamiento en evolución sobre la mejor manera de proceder. Una de las lecciones más valiosas se relaciona con la interacción entre el estado y el mercado para promover el desarrollo. Describe un enfoque favorable al mercado en el que los gobiernos permiten que los mercados funcionen bien y en el que los gobiernos concentran sus intervenciones en áreas en las que los mercados resultan inadecuados. El informe analiza cuatro aspectos principales de la relación entre los gobiernos y los mercados: (a) invertir en las personas; (B) el clima propicio para que las empresas prosperen; (C) la integración de los países con la economía global; y (d) una base macroeconómica estable para un progreso sostenido. El informe destaca que, sobre todo, el futuro de los países en desarrollo está en sus propias manos. Las políticas e instituciones nacionales son la clave para un desarrollo exitoso.