Las obras de riego del canal Pencahue pondrán bajo riego alrededor de 12.000 hectáreas, provocando un cambio radical en las técnicas de cultivos y en las alternativas de producción en aquellos suelos que pasan de secano a riego. La Comisión Nacional de Riego ha establecido que toda obra nueva de regadío debe ir acompañada de dos componentes básicos: investigación en riego en la zona agroclimática y transferencia de tecnología a usuarios. Para lograr dicho objetivo se estableció un convenio con el Instituto de Investigaciones Agropecuarias que se inició en el año 1992 y que ha permitido, entre otros aspectos, estudiar los suelos del valle, sus características, el comportamiento de los cultivos bajo riego y nuevas alternativas de producción. Las cartillas sobre "Cultivos para el valle de Pencahue" son el resultado de la experiencia del INIA en el valle y pretenden orientar a los extensionistas que trabajan capacitando a usuarios del canal, a los agricultores, a fin de mejorar sus técnicas de cultivo e incorporar nuevos rubros, y a todas aquellas instituciones, profesionales y personas interesadas en esta nueva realidad del valle.