Dentro de su área de distribución natural, el pino rojo (Pinus resinosa Alt.) Ha sido reconocido durante mucho tiempo como una especie deseable para plantaciones comerciales debido a su rapidez tasas de crecimiento, buena forma y relativa ausencia de insectos y enfermedades graves daño. Se plantó por primera vez en la Reserva Forestal Sandilands en el sureste Manitoba en 1927 y en 1958 el número sembrado superó el millón. En 1958, cuarenta y una plantaciones establecidas entre 1931 y 1946 fueron examinadas para determinar su supervivencia y crecimiento. Al mismo tiempo, las observaciones fueron limitadas hecho de algunos de los factores más importantes que aparentemente habían afectado su desarrollo.